¿Qué hacemos los farmacéuticos frente a las enfermedades silenciadas?

Por: Andrea Massa

Respecto de la problemática de enfermedades raras, olvidadas, silenciadas, los farmacéuticos de hospital estamos sumamente familiarizados y una de nuestras funciones en las áreas de elaboración de los Servicios de farmacia de los hospitales es precisamente ésta: encontrar una posible solución y dar una respuesta para que el paciente reciba la terapéutica que necesita, dentro de un marco de Buenas Prácticas de elaboración de medicamentos magistrales, atendiendo a un diseño galénico que tendrá en cuenta entre otras cosas el comportamiento fisicoquímico de todos los componentes, la expresión correcta de las dosis, las incompatibilidades e interacciones con envase, etc.

La preparación forma parte de una de las responsabilidades más antiguas de los farmacéuticos, para algunos el corazón mismo de la profesión y si bien sabemos que existen un gran número de medicamentos que son comercializados, en muchos casos nos encontramos con que dichas especialidades medicinales pueden no ser aptas para el paciente. Posibles causas de esto son la patología del paciente (pacientes con sonda naso gástrica o naso yeyunal con vía oral no funcionante), su edad (principalmente pacientes neonatos y pediátricos) quienes tienen la particularidad de la dosificación en mg/kg (en cantidades mucho menores que las comercializadas y con una terapéutica que será en una dosis variable a medida que el paciente crece) y la imposibilidad utilizar formas farmacéuticas sólidas orales. Nos encontramos también con situaciones en las que no existe especialidad medicinal, ya que es imposible formular los principios activos a escala industrial por su mala estabilidad, aunque sí es posible preparar formulaciones extemporáneas.

En todos estos casos hablamos de Formulaciones Huérfanas, que se definen como aquellas cuya dosis, forma farmacéutica o composición no se encuentra disponible en forma comercial como especialidad medicinal.

Ya en la formación de grado toda esta temática se aborda desde la Farmacotecnia, que nos permite encarar el acto de formulación realizando una búsqueda bibliográfica acerca de las características del principio activo, compatibilidad con excipientes, cuáles son aquellos que lo van a acompañar en la fórmula, características como pH necesario, solubilidad, estabilidad, etc. No es casual que uno de los primeros trayectos formativos que tenemos en la Residencia de Farmacia Hospitalaria es el de Formas Farmacéuticas no estériles, pero ya desde un abordaje que tiene que ver con la terapéutica para ese paciente que no puede acceder de otra manera a ella, por ejemplo un paciente que padece una enfermedad de muy baja prevalencia (en Argentina menor a 1/2000) y para el cual la industria es reacia a la inversión por su escasa rentabilidad y alto costo de investigación y comercialización o bien puede tocarnos hacer frente a situaciones de desabastecimiento o retirada de mercado de medicamentos fabricados.

Podemos intervenir cuando la solución está a nuestro alcance, a través de la reformulación de especialidades estando éstas disponibles. Si no es posible, el Estado a través de la de la compra por uso compasivo autoriza la importación bajo condiciones especiales, de la medicación para esos pacientes a través de la Disposición 4622/12. La Producción Pública de medicamentos (Ley 26688) y sus reglamentaciones) es un compromiso que asume el Estado a fin de garantizar el acceso a la salud de sus ciudadanos.

Datos de la autora: Farm. Andrea Massa. Responsable Sector elaboración HIGA San Roque Gonnet. Referente disciplinar Comisión de Gestión de Residencias Escuela de Salud “Floreal Ferrara” Ministerio de Salud Provincia  de Buenos Aires.

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