Mucho se habla en los claustros docentes de las Universidades de Farmacia sobre el Seguimiento Farmacoterapéutico (SFT), su metodología de trabajo, sus objetivos y esencialmente lo que significa este tipo de servicio para todos los pacientes. Por lo tanto es muy normal que los farmacéuticos recién graduados egresen de dichas universidades con los conceptos claros sobre esta práctica profesional.
Pero si preguntáramos sobre él, en los pacientes atendidos dentro de nuestras far-macias oficinales, tal vez encontremos muy pocos que puedan explicar que se trata de una prestación que se comienza a ofrecer pero que no está lo suficientemente difundida.